Estudiantes y profesores fueron reprimidos este lunes mientras se manifestaban por la subasta de 16 escuelas en São Paulo en la Bolsa de Valores de dicha ciudad brasileña.

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La Policía Militar reprimió, con el uso de bombas de gas y porras a los manifestantes, los cuales se oponen a la asociación público-privada (APP) del Gobierno estatal que pretende establecer la concesión de unidades de red a consorcios que serán responsables de la construcción y mantenimiento de estas escuelas.

En este sentido, el aviso de subasta niega el principio de gestión democrática de la educación y la integración entre la administración del espacio físico y las funciones pedagógicas.

De acuerdo al Sindicato de Profesores de Enseñanza Oficial de São Paulo (Apeoesp), se trata de la subcontratación de una actividad esencial al servicio de educación pública. De igual manera, el gremio precisó que por desgracia, el gobernador de Bolsonaro, Tarcísio de Freitas, consiguió directamente que el presidente del Tribunal de São Paulo anulara la medida cautelar que habíamos ganado para detener la privatización de las escuelas estatales.

La movilización tenía como objetivo derrotar el ataque del Gobierno Tarcisio/Feder que es un “ataque del Gobierno a la educación pública!” y las políticas de desmantelamiento de la escuela pública.

De igual manera, insistieron en que luchan contra el cierre de las clases nocturnas.

Por su parte, el presidente de la Apeoesp, Fábio Moraes refirió que “la gestión de las escuelas debe organizarse democráticamente con la dirección de la unidad y el Consejo Escolar. Como lo determina la LDB [Ley de Directores y Bases de la Educación Nacional] y la Constitución Federal”.

Por su parte, el secretario de Finanzas de Apeoesp, Roberto Guido refirió que “el primer ministro, bajo la dirección del gobernador Tarcísio de Freitas, rodeó la Bolsa para impedir el acceso de los manifestantes. Los estudiantes, en cierto momento, queriendo acercarse, intentaron pasar una barrera que construyeron, y la policía lanzó una bomba lacrimógena contra los niños y profesores, que estaban un poco más lejos”.

“Vinimos aquí democráticamente para expresar nuestra posición contra la privatización de 33 escuelas, porque la educación no es una mercancía. Ese fue el mensaje que le dimos aquí a Tarcísio. Las escuelas fueron privatizadas, pero nuestra lucha continúa, y siempre vamos a seguir la lucha, porque la educación no es una mercancía”, precisó el secretario de Administración y Finanzas de la Central Única dos Trabalhadores de São Paulo (CUT-SP) y profesor Douglas Izzo.

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